Publicado el 11/03/2013 03:15
La mayor presión proviene del Departamento de Energía estadounidense, que obliga a la empresa a pagar 193 millones de dólares de un préstamo hecho por el gobierno de ese país.
En los últimos meses Fisker ha tratado de atraer nuevos compradores en mercados como el chino o el europeo, que representan volúmenes importantes además del norteamericano. Han pasado semanas sin que se produzca una sola unidad del sedán Karma y el viernes pasado hubo un despido del 75% de su fuerza de trabajo en Estados Unidos.
Una de las estrategias esperadas es que al anunciar su acogida al capítulo 11 por bancarrota, aumente la cantidad de ofertas por Fisker, de la que se rumora ha hablado con más de cinco fabricantes sin llegar a un acuerdo final que incluya el pago de la deuda.
Reuters vía AutoNews
Leer en integridad sobre www.automovilonline.com.mx