Publicado el 15/03/2013 15:52
Todo transcurría con normalidad, una mañana más en un típico concesionario estadounidense de coches usados. Un comprador como otro cualquiera se acercó, refresco de Pepsi en la mano, hacía un vendedor. Quería comprar un coche, pero antes lo probaría. No obstante, el cliente resultó ser el piloto Jef...
Leer en integridad sobre www.infocoches.com