Publicado el 18/03/2012 18:15
El Subaru BRZ (Boxer Rear-Wheel drive Zenith) es un curioso coupé que nace fruto de la conjunción de fuerzas entre Subaru y Toyota, que han dado como resultado a tres coches muy interesantes: Subaru BRZ, Toyota GT-86 y Scion FR-S. La idea de hacer este coche surge de la necesidad de hacer un modelo que fuera divertido, efectivo, ligero y nada radical sin que sus costes se dispararan.
Ha levantado tanta expectación su llegada, que el resto de marcas han empezado a mover ficha tímidamente. Alfa Romeo sacará su 4C, Nissan ha dejado caer que podrían estar trabajando en un nuevo 200SX, que Renault resucitaría bajo el nombre de Alpine. ¡Parece que esto se anima!
Para hacer este coche se ha partido de cero. El bastidor es completamente nuevo. Su configuración es la de un coupé de 2+2 plazas, con el motor en posición longitudinal delantera y propulsión trasera. Cuenta con mecánica de gasolina 2 litros atmosférica y cuatro cilindros Boxer de Subaru, con 200 caballos, a la que Toyota ha añadido su sistema de inyección D-4S.
Al ser un motor plano, se ha podido ubicar en una posición muy baja y atrasada, buscando así un bajo centro de gravedad. Dispone de dos cajas de cambios de seis velocidades. Por un lado una manual de deportivo tacto y cortos recorridos de palanca y por el otro una automática por convertidor de par, la misma que emplea el Lexus IS-F, con accionamiento manual por medio de levas o el propio selector.
Subaru todavía no tiene definido, al menos en el momento de escribir este artículo, el nivel de equipamiento. Sí confirma que habrá dos, por lo que estos no han de ser muy distintos de los BRZ y BRZ Premium con los que se vende en otros mercados. Es importante tener claro lo que ofrece cada acabado, puesto que en el Premium se dispone de desarrollos más cortos en la variante manual, diferencial autoblocante tipo Torsen, discos de freno delanteros de mayor diámetro y neumáticos 215/45 R17 en lugar de los 205/55 R16 de la versión básica.
En el interior hay espacio para dos ocupantes, que viajaran con relativa comodidad. No es un coche muy duro para la filosofía deportiva que tiene. La incomodidad viene por el ruido de rodadura, provocado por unos pasos de rueda poco insonorizados, sobre todo los traseros. Su versión más ligera pesa 1,202 kilos, y eso se consigue a base de reducir peso de todas partes. Las plazas traseras son simbólicas, si bien te pueden sacar de un apuro en ciudad, o si tus acompañantes no son muy altos, o son niños (lleva Isofix). Los asientos son deportivos y sujetan bien el cuerpo.
Pude probar las dos versiones, manual y automática, que equivalen a un acabado Premium, que cuenta hasta con navegador, manos libres, etc. Entre las dos se nota la diferencia de desarrollos, sobre todo en conducción deportiva. Mi recomendación para este coche se encuentra en la manual. Con el automático puedes conducir con deportividad y te gustará, pero si lo quieres para meterlo en circuito de vez en cuando, mejor el manual.
En ciudad es un coche más. Pintón, no muy ruidoso y relativamente ágil en atascos. No es lo mejor que hay pero no te planteará problema alguno. Ya con algo más de velocidad, haciendo una conducción dentro de lo normal, tendrás un coche que te transmite algo más que el resto. Puedes hacer medias de consumo por arriba de los 10 km/l, que no está nada mal para un deportivo de 200 hp.
Si lo quieres para conducir, ya sea en un circuito o en un puerto de montaña, tendrás un bastidor que te gustará. Frena bien (tiene, además, un buen tacto de pedales) y su dirección es precisa y obediente; algo blanda con el tacto eléctrico pero dentro de lo admisible. El eje delantero entra muy bien y admite acelerar pronto, con un comportamiento neutro y efectivo.
Si ya quieres algo más, tendrás que desconectar las ayudas, total o parcialmente, y ser un poco más brusco a la entrada de la curva, acelerando con un poco más de decisión, momento en el que te deleitará con una cruzada noble y suave; aquí se agradece el bajo peso y las menores inercias. Como resumen se podría decir que tiene la efectividad de un Clio RS con chasis Cup pero con la diversión de la propulsión trasera y siendo algo más cómodo de suspensiones.
Leer en integridad sobre www.automovilonline.com.mx