Hay algo sospechoso en el vídeo que veremos después del salto de página. No, no es que creemos que fue puesta en escena, y que en realidad no tienen mucho que ver con el coche, aunque se puede argumentar que el Infiniti FX, como auto, tiene una especie de racionalización al reaccionar ante situaciones difíciles.
No, nos estamos refiriendo al hecho de que el auto termina durmiendo con los peces después de que su conductor al parecer borracho estaba y no había pasado la prueba de límites de su off-road. Como verás, el Infiniti se las arregla para extraer de su interior el agua con sal varias veces antes de sucumbir finalmente en las garras del H20. Por lo pronto pasará a la inmortalidad como un banco de arena.
Mira los malos resultados de una fiesta en la playa en el vídeo a continuación: